martes, 1 de julio de 2008

Argumentaciones vacuas

Me he encontrado ayer mismo, en otro sitio que muchos conocereis, una argumentación tal que así:

Sí, bueno, es verdad: la Iglesia nació pobre. Al Capone también. En la tarjeta de visita del famoso delincuente decía: vendedor de antigüedades. La Iglesia también dice ser una organización espiritual y dedicada al negocio de la salvación de las almas. Nadie amenaza la financiación de la Iglesia, pues sus fieles pueden financiarla cuanto deseen. O bien no hay muchos fieles, o bien no aflojan la mosca, y es la Iglesia la que reclama dinero a todos los demás, a cambio (como en Chicago) de la protección espiritual que ofrece a quien no la necesita y para defenderle de peligros que ella misma crea.

Aprovecharé la ocasión que me brinda este párrafo para desarrollar una idea que me parece importante a la hora de analizar algunos textos. Independientemente de cualesquiera otras consideraciones, el párrafo en cuestión no es una argumentación. Lo parece, pero no lo es. Como pr
ueba de ello, me permitiré hacerle una ligera modificación:

Sí, bueno, es verdad: el sindicalismo nació pobre. Al Capone también. En la tarjeta de visita del famoso delincuente decía: vendedor de antigüedades. Los sindicatos también dicen ser unas organizaciónes obreras y dedicados al negocio de la defensa de los trabajadores. Nadie amenaza la financiación de los sindicatos, pues sus afiliados pueden financiarlos cuanto deseen. O bien no hay muchos afiliados, o bien no aflojan la mosca, y son los sindicatos los que reclaman dinero a todos los demás, a cambio (como en Chicago) de la protección que ofrecen a quien no la necesita y para defenderle de peligros que ellos mismos crean.

Curioso, ¿verdad? con un esfuerzo mínimo he convertido una "argumentación" anticlerical en otra antisindicalista. ¿Es que el argumentador que ha desarrollado el texto original es tambien anticlericalista? Por supuesto que no. Lo que aquí ocurre es que se presenta como argumentación referida a un objeto (la iglesia, en este caso) algo que nada tiene que ver en realidad con ese objeto, es lo que yo llamaría una mera "forma argumentativa"

En la medida en que una argumentación es susceptible de este tipo de ejercicios (es decir, cuanto más facil sea el proceso de intercambio del objeto de la argumentación), tal argumentación se aproximará a una mera forma, y será util, sí, pero solo como ejercicio literario.

5 comentarios:

Montag dijo...

Es retórica Herodoto, nada más. Como busques un sentido lógico a todo lo que leas apañado vas.

Evocid dijo...

Hombre, evidentemente no puedo tratar de hacer un análisis lógico de todo lo que pase por delante de mis ojos, Pero ayer me encontré con ese texto y me apeteció hacerle ese análisis. Creo además que este caso puede ser muy instructivo.

Aprovecho tambien para añadir una cosa. El objeto de crítica de este texto es intercambiable, sí, pero no universalmente intercambiable. Para efectuar tal intercambio sería necesario que el objeto sustituto recibiera algún tipo de subvención por parte del estado (fuera de esto, todo lo demás es paja, solo por esto la intercambiabilidad no es universal). Luego el argumento sí sería correcto en el caso de asumir que se está efectuando una crítica a toda organización que reciba subvenciones.

Evocid dijo...

Por cierto, he colgado en valdeperrillos otro extracto de "la rama dorada" que tal vez consideres interesante, sobre los tipos de magia:

http://valdeperrillos.com/blogs/herodoto/james-george-frazer-rama-dorada#comment-4202

Shankara dijo...

Herodoto: la forma, lejos de servir de distracción retórica, es la que posibilita el razonamiento deductivo. De hecho, tú mismo demuestras que la forma del argumento de R.R. es inválida hallando otro argumento con la misma forma y una conclusión que podemos suponer incorrecta. Y sin necesidad de entrar a valorar la Iglesia. Ahí es nada.

De paso, el argumento original es un claro ejemplo de 'reductio ad Hitlerum'.
http://en.wikipedia.org/wiki/Reductio_ad_Hitlerum

Evocid dijo...

Shankara, es precisamente Rafael Reig el que ha llegado a una conclusión sobre la iglesia sin necesidad de tener que decir nada sobre ella (aparte de que recibe financiación estatal). Pero si en su argumentación empleara elementos que fueran característicos de la iglesia (creencia en Dios, cultos comunitarios,...) entonces yo no hubiera podido jugar con su argumento del mismo modo.

La lógica formal es forma, sí. Pero si esa forma no está anclada al mundo sensible, y esa es la función de las premisas, es forma vacia.

volviendo al argumento original, no se si será un 'reductio ad Hitlerum' (yo lo conocía como ley de Godwin), lo que sí se es que no es un caso claro. Al menos yo no lo veo por ningun lado. En todo caso, y por poner alguna etiqueta, yo vería una falsa analogía.