La Rama Dorada

Hay un bonito pueblo llamado Nemi unos 20 Km. al sudeste de roma, tiene unos 2000 habitantes

Este pueblo toma su nombre del bosque que le rodea y el lago que hay en su ladera, llamado también lago de Diana. Recibe éste segundo nombre en recuerdo de que hace unos 2000 años había en ese bosque un santuario dedicado a Diana, diosa romana de la caza y la fertilidad.
Todo el bosque era sagrado, pero especialmente sagrado era uno de los árboles, que estaba dentro del santuario. Un sacerdote era el encargado de vigilarlo, y además de ser sacerdote y vigilante ostentaba el título de rey del bosque, titulo probablemente más honorífico que otra cosa. No obstante debía tener su prestigio tal puesto, pues solo había una manera de acceder a él: matando al rey anterior. Para ello el aspirante debía antes cortar una rama del árbol sagrado, demostrando con ello su valía para el puesto. Una vez hecho esto podía disputar al rey su título en un combate singular a espada. El ganador sería el nuevo (o viejo) rey.

Extraña historia ¿no? a los propios romanos de aquella época les debía parecer extraña, manteniéndose como una tradición de origen no solo mitológico, sino también incierto. E incierto se mantuvo el origen de dicho sacerdocio hasta que a finales del s. XIX el antropólogo James G. Frazer trató de buscarle una explicación. Tal búsqueda es el hilo conductor de "La Rama Dorada", libro en que a lo largo de 800 páginas Frazer trata de darle una explicación al mito analizandolo y comparándolo con otras tradiciones y leyendas de diversas partes del mundo.

Algunas de las ideas defendidas en su día por Frazer en este libro estén desfasadas, no obstante es uno de los más importantes que de antropología se han escrito, y aun continúan vigentes sus teorías acerca de la magia. La rama dorada es, además, aun empleada por los estudiosos de la mitología por la gran cantidad de información que aporta.

(Diana, diosa de la caza)